Primer texto. Toño Cartín

Victor Morales. De la serie Dorado NY. 2010


Al observar este proyecto de Víctor Morales no pude evitar hacer una relación con un cuento llamado Cocorí, escrito por Joaquín Gutiérrez y ambientado en el Caribe costarricense. Ahí,  el protagonista homónimo es un niño negro que, cuando conoce a una niña rubia que viene de paseo en un crucero se enamora de ella. Cuando ella se marcha, el niño se embarca en una aventura por la selva, cuestionando a varios animales sobre el significado del amor, en este caso simbolizado por la muerte de una rosa que le obsequió la niña.

Percibo varias (ciertas?) relaciones entre ambas obras, la más obvia, son las mujeres rubias: efímeras,  inalcanzables. También, se puede observar en las dos obras una expresión  implícita de atracción hacia lo diferente, hacia lo que no estamos acostumbrados, un interés por lo que nos resulta ajeno. En los dos casos se refiere a la curiosidad como herramienta de conocimiento, y de relación con los otros seres humanos.

Por otro lado, tienen diferencias muy marcadas, en el cuento de Joaquín Gutiérrez existe una cercanía entre los personajes, tienen su tiempo, aunque su encuentro es breve, los personajes construyen una relación sentimental. En cambio, en “Dorado N.Y” me llama la atención que el autor trata de ocultar los rostros de las mujeres, sus cabelleras están ubicadas en el plano central, el resto del paisaje urbano es un elemento secundario, y hasta puede pasar desapercibido; pueden ser cualquiera que pasea por la calle y desaparece. Existe una negación por la exotización de las personajes; ese anonimato crea cierta incertidumbre, siento la necesidad casi obsesiva de imaginar el rostro de cada una, y eso es algo que le da peculiaridad a la obra, se puede observar una y otra vez, escribir muchas historias, e inventar sus desenlaces. Esto crea de una maner
a singular un acercamiento con la propuesta.

Es interesante que la utilización de un elemento tan banal, tan cotidiano, tan sencillo, logre expresar una idea en cierta medida universal, humana, y que despierte la curiosidad y la imaginación de los demás.

1 comentario:

  1. Gracias Toño. Está muy claro y muy fluido tu texto. La comparación de la obra fotográfica con la obra literaria es muy acertada. No sólo sirve para dotar al artículo de una introducción llamativa, sino que marca desde el principio cuáles serán los elementos de forma y contenido que señalarás en las fotografías.
    En ese sentido me parecen muy agudas tus observaciones sobre el tema (las mujeres rubias como materialización de un ideal y como encarnación de lo exótico) y sobre la retórica visual: la recurrencia de la figura femenina de espaldas, la centralidad de la cabellera en la composición, la disolución del paisaje urbano en el segundo plano y, aunque no lo dices, la sensación general de aislamiento y distancia entre el sujeto fotografiado y el fotógrafo.
    Sólo una frase me pareció poco clara en el texto, y es: " Existe una negación por la exotización de las personajes". Creo que debes revisar esa oración, definir muy bien qué es lo que quieres decir y pensar de nuevo la mejor manera de decirlo.
    Igual te subrayé algunos otros detalles que deben corregirse:
    1-"(ciertas?)"
    Aquí falta el signo de interrogación al principio del texto
    2-"...relaciones entre ambas obras, la más obvia..."
    Aquí, en lugar de coma, deberías usar un punto y seguido
    3-"...diferencias muy marcadas, en el cuento..."
    Aquí, en lugar de coma, estaría mejor poner dos puntos
    4-"desapercibido"
    Es un error común escribir desapercibido (desprevenido) en lugar de inadvertido (no advertido). Te sugiero corregirlo.

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